Los herederos del recién fallecido actor de Hollywood Robin Williams acaban de vender la finca que poseían en California, Villa Sorriso. Gracias a ello podemos ver las fotos de esta espectacular propiedad que fue uno de los caprichos del actor de las mil sonrisas. Un artículo más de nuestra sección de casas de famosos.
Situada en el famoso Valle de Napa, en lo alto de las montañas Mayacamas y a pocos kilómetros de distancia de la ciudad de San Francisco, la casa fue construida en el año 2003 con la idea de ser el lugar de descanso de Robin Williams y su familia. Una finca de recreo para disfrutar de la naturaleza y el aire puro, con cuadras para caballos, una piscina gigante, un estanque alimentado por un manantial natural, spa, pista de tenis y varias rutas de senderismo que recorren las 260 hectáreas de la propiedad. Otro de los atractivos de la finca es un gran viñedo y unas bodegas de alta tecnología capaces de producir al año cientos de litros de Cabernet Sauvignon, Merlot y Cabernet Franc. Esto último fue lo que convenció a los nuevos propietarios a adquirir la finca, ya que son una conocida familia bodeguera francesa.
La casa principal está inspirada en el estilo arquitectónico Paladio, creado por el arquitecto italiano Andrés Paladio en el siglo XVI. Aunque se trata de una modernización, la construcción recoge los principios básicos de este estilo. Elementos clásicos basados más en la proporciones matemáticas que en la riqueza ornamental, tres pisos con acceso principal a la planta central y una fachada elegante, sencilla y austera. La mayoría de los elementos constructivos están importados de Europa. En el exterior piedra caliza portuguesa, pan de oro y roble francés con incrustaciones de madre perla para los paneles de la biblioteca y azulejos de mosaico de vidrio italianos. Sus 1.800 metros cuadrados de superficie construida se dividen en nueve dormitorios, quince cuatros de baño, varios salones, comedor, gran cocina, sala de billar, biblioteca, ascensor, bodega, cuartos de seguridad y una impresionante sala de cine con capacidad para 12 personas. La propiedad dispone además de una casa independiente para invitados de casi 300 metros cuadrados.
La finca ya estaba a la venta antes de la prematura muerte del actor en el año 2014 por 35 millones de dólares, pero ha sido este año cuando finalmente ha conseguido venderse por un precio aproximando de 18 millones.
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