Este impresionante chalet situado en La Moraleja destaca por su arquitectura audaz y equilibrada que tiene como finalidad proteger la privacidad de sus propietarios. Mientras su fachada posterior se abre de forma generosa hacia su gran jardín, la principal queda completamente oculta tras unos laberínticos jardines y muros que no dejan apreciar la grandiosidad de este chalet desde la calle. La privacidad está garantizada.
Situada en una de las calles centrales de la urbanización de La Moraleja, la casa de marcado estilo contemporáneo cuenta con casi 2.000 metros cuadrados construidos sobre una bellísima parcela de una hectárea. Actualmente se encuentra a la venta en la inmobiliaria Promora por un precio de 12 millones y medio de euros, y está casi a estrenar ya que sus propietarios han vivido muy poco tiempo en ella.
Sus dueños, grandes amantes del arte moderno, querían una casa donde disfrutar de su familia, sin lujos sofisticados ni grandes pretensiones. Un hogar cómodo, bien distribuido y luminoso. Se diseñaron espacios de gran tamaño unidos entre sí, sin barreras arquitectónicas, que facilitan pasar de un lugar a otro a lo largo del día. Se evitó dotar a la casa de sistemas tecnológicos avanzados que complican su mantenimiento. Y se abrió el interior de la casa al jardín con inmensos ventanales, para poder disfrutar fácilmente del aire libre y de la luz que entra desde el exterior. Casa y jardín se conectan de tal forma que ambos de convierten en una unidad indivisible. Desde cualquier punto de la vivienda apreciamos las infinitas praderas de césped del jardín, el lago-fuente y el bosque que limita la parcela. El exterior del chalet también ha sido pensado para que sea una de las partes más usadas, con varias terrazas y porches que sirven de nexo de unión entre el interior de la casa y exterior, y permitiendo que pasar de un lado a otro sea algo completamente natural.
Dispone de dos plantas más sótano. La planta principal se reparte en un gran hall con aseo y el arranque se una gran escalera realizada en maderas nobles. Una sala de estar que es utilizada por los hijos de los propietarios como zona de juegos. Un gran salón de 200 metros cuadrados con comedor independiente. Una biblioteca simétrica que termina en un gran ventanal con vistas a un pequeño jardín privado formado por un un bello mar de bojs y grandes piedras incrustadas, diseñado por el prestigioso paisajista Fernando Caruncho, para transmitir paz y sosiego. Completa esta planta del chalet, una gran cocina con su comedor de diario, la zona de servicio y las instalaciones de de apoyo a cocina: la cámara frigorífica, la lavandería y la despensa.
En la planta superior, que destaca por tener unos llamativos y alegres pasillos pintados con graffitis, se encuentran los dormitorios principales y las zonas más privadas de la familia propietaria. Cuatro dormitorios de grandes dimensiones, cada uno con su propio cuarto de baño y sala de estar. El dormitorio principal dispone además de un espectacular vestidor, su propio gimnasio y unas vistas impresionantes del jardín.
El sótano se distribuye en una gran sala de ocio y fiestas, varios trasteros, un parking con capacidad para seis coches y las dependencias técnicas de la casa.
Gracias a la inmobiliaria Promora y a las fotos que nos ha facilitado, hemos podido descubrir toda la grandeza de este impresionante chalet que de otra manera seguiría oculto a miradas indiscretas.
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